Frijoles nativos de Tepetlixpa

Los frijoles son uno de los alimentos básicos más variados y nutritivos que existen y son esenciales para el sistema agrícola milenario conocido como milpa, ya que fijan nitrógeno al suelo para otras plantas y se apoya en el maíz al enredarse para poder crecer. Esta simbiosis entre varias plantas agroalimentarias del sistema milpa es cada vez menos frecuente en el campo, al igual que el cultivo de las cientas de variedades de frijol (Phaseolus) nativo de México.

El Baluarte

El Baluarte de los Frijoles Nativos de Tepetlixpa, coordinado por la cooperativa Casa Tlalmamatla, ha nacido en el 2016 para preservar y promover el consumo de esta diversidad genética de frijoles cultivados en el sistema milpa mediante una producción agroecológica.

El Baluarte ha nacido en el marco del proyecto “Slow Food y red de Terra Madre en México: Acciones y proyecciones en la lucha contra la pobreza rural y la desigualdad a través de la promoción y puesta en valor del patrimonio local de alimentos”. Uno de los objetivos del Baluarte es el fortalecimiento de las capacidades productivas del grupo cooperativo a través de inversiones en aspectos cruciales como el almacenamiento de granos, maquinaria y equipo, preservación de semillas in situ, presentación y envasado. Además, se pretende crear un protocolo de producción que permita a otros productores de la región que lo cumplan y acaten incorporarse al Baluarte. Por fin, desarrollar una campaña de comunicación y organizar una serie de eventos de promoción orientados a buscar nuevos mercados diferenciados y consumidores conscientes.

frijoles

En el municipio de Tepetlixpa, en el estado de México, un mapeo realizado por Slow Food ha detectado una enorme riqueza de frijoles nativos que son cultivados en asocio con maíces nativos (ancho, azul, blanco, pepitilla y rojo), calabazas, habas, alberjones, chicharos, amaranto, quinoa, aguacate, nuez de castilla, zapote, ciruela y otras hortalizas, frutas y quelites.

Se trata del frijol amarillo bola (de color amarillo mostaza y con alto contenido en carbohidratos), ayocote morado (grueso, varía de los colores azules a violeta intenso, de sabor dulce e intenso, ideal para el relleno de los tlacoyos y los tamales de frijol), bayo (blanco amarillento o rosado uniforme), mantequilla (beige, crema o café muy claro un poco rojizo, habitualmente se consuma cocido en guiso), pinto (rosa claro un poco café con manchas más obscuras aleatorias), vaquita amarillo (mostaza claro y blanco aleatoriamente en manchas, se consumen cocidos con plantas aromáticas y otras verduras) y vaquita rojo (de color blanco y rojo aleatoriamente en pequeñas manchas).

A pesar de sus excelentes caracteristicas nutricionales y su sabor especial, en la región estos frijoles no están difundidos entre los consumidores. No son conocidos tampoco por muchos agricultores, ya que sus rendimientos son bajos en comparación de las variedades comerciales, lo cual los vuelve poco atractivos como cultivo. La cosecha de estos frijoles también es complicada, ya que al estar asociada siempre con el maíz debe ser hecha a mano y esto incrementa los costos de producción. Por lo tanto se producen a pequeña escala para consumo familiar y para la preservación de la semilla.

Área de Producción

Tepetlixpa, Estado de México, México

Productores

17 familias integrantes la cooperativa Casa Tlalmamatla

Responsable del Baluarte

Emma Villanueva Buendía

Tel. +52 5516452557

opaleui@hotmail.com

Responsable Slow Food del Baluarte

Eduardo Correa Palacios

Tel. +52 55 54386285

eduardo.correa@slowfood.mx

Baluarte Sostenido por

Ford Foundation

En colaboración con

Comida Lenta A.C.